jueves, 30 de junio de 2016

ABERRACIONES RESIDUALES

El próximo paso que debemos mejorar en la contactología especializada es la posibilidad de corregir las aberraciones ópticas generadas por la interface endotelio-humor acuoso, y las internas relacionadas con el cristalino y el vítreo.
Este caso es muy interesante porque si bien los SimK no son elevados, la cornea tiene una diferencia muy grande de curvaturas dentro de la zona pupilar induciendo una enorme cantidad de HOA. Esta diferencia adquiere el valor de 30 dioptrías de diferencial de potencia refractiva DENTRO de la zona pupilar.
Lástima que no tengo un pentacam para ver la topografía posterior porque cuando hago la evaluación biomicroscópica me encuentro que el endotelio tiene una deformación superior a la que recién mencioné de cara frontal corneal.
Producto de todo esto, el paciente con una lente escleral esférica obtiene solo 20/80+ y le tengo que adicionar un cilindro externo de -2.00 x 180° para alcanzar 20/40-.
Si agrego estenopéico entonces alcanzo 20/25.
Este caso, seguramente se podría mejorara aún más si tuvieramos acceso a torneado free form guiado por aberrometría.
En este momento algunos lugares en el mundo ya están comenzando a utilizar esta tecnología que es similar a la que se utiliza para la cirugía refractiva guiada por frente de onda. Sin embargo no es fácil acceder a ella porque hay que contar con un aberrómetro total y desarrollar el software que calcule la superficie frontal de la lente para compensar las HOA internas.
Hacia allí vamos...

TOMOGRAFÍA DE COHERENCIA ÓPTICA Y LENTES ESCLERALES

Hace 2 años estoy trabajando en un sistema de diseño de lentes personalizados sobre perfilometría mediante fotografía en ángulos y ahora hace un par de meses he conseguido directamente acceso a un tomógrafo OCT que me permite realizar cortes en diferentes ejes midiendo la asimetría de la esclera.
Debo decir que este sistema es un enorme paso adelante en el trabajo de precisión y en la anticipación de potenciales problemas con el aterrizaje de la lente escleral.
Hasta ahora, midiendo la toricidad escleral he encontrado que la gran mayoría de los pacientes tienen diferencias entre ambos ejes principales cercanas a los 250/300um e incluso tuve un caso extremo con una diferencia de 600um.
Lo más destacable es la anticipación a problemas potenciales referidos a compresión en el eje plano o a la filtración de secreción por el eje más curvo.
Estoy preparando algo más completo con todos estos casos pero hoy voy a compartir uno de ellos para graficar lo predecible que es el diseño de lentes sobre OCT con el resultado final.
Se trata de un queratocono grado 4 con opacidad central y estrías, cornea delgada de 290um y una toricidad escleral de 200um.
La imagen del OCT muestra la lente proyectada y luego la lente ya colocada en el ojo, con 3 horas de uso con fluo retenida, el clearance proyectado antes de acentamiento fue de 230um y la banda de apoyo escleral fue calculada para tener un ancho de 1.25mm que reparte el peso de la lente en una mayor superficie. A su vez la lente tiene diseño de apoyo escleral tórico de 200um de diferencia sagital, ambas cosas combinadas (amplitud de la banda de apoyo + toricidad periférica) reparten el peso de la lente en forma uniforme en los 360 grados reduciendo el nivel de variación de clearance por acentamiento.
Como resultado se obtiene una esclera blanca, sin compresión de vasos en los 360 grados y un alto índice de confort.

domingo, 15 de mayo de 2016

PERIFERIA TÓRICA

Tanto en el queratocono como en los astigmatismos, la cornea pierde su simetría rotacional y comienza a traernos dificultades para obtener una adaptación confortable y estable.
Hace tiempo se utilizaban técnicas que hoy podemos considerar demasiado agresivas para el tejido corneal como cuando se recomendaba adaptar 1/3 de ajuste del cilindro corneal o cuando para un queratocono se recomendaba empezar con una CB 4Dts más plana que la cornea.
Estos conceptos estaban basados en la tecnología que existía en ese momento, sin embargo actualmente tenemos herramientas mucho más sofisticadas que nos permiten desarrollar una adaptación más precisa, segura y confortable.
Es común escuchar a los pacientes que dicen.... las lentes rígidas son molestas..... te lastiman el ojo..........se saltan a cada rato.......te hacen úlceras.... etc... etc..
Por más que uno piense... es que esa lente no estaba bien adaptada, el concepto permanece en la cabeza y se generaliza.
Por esta razón es que es de suma importancia disponer de la mayor variedad de diseños que nos permitan imitar la geometría corneal de forma que evitemos el roce excesivo sobre una parte de la cornea que pudiera llegar a erosionarse.
Si nosotros buscamos colocar una lente RGP de geometría esférica o asférica simétrica, en una cantidad importante de casos dejaremos lentes adaptadas con algún borde levantado, o con roce excesivo en un determinado eje.
Esto se debe a que todas las corneas presentan asimetrías, incluso las corneas regulares no ectásicas también suelen tener una curvatura más plana en el eje horizontal que el vertical.
En corneas irregulares o astigmáticas las diferencias de elevación sectorizadas pueden alcanzar valores significativos.... entonces.... hay que colocar lentes que reproduzcan esas diferencias de elevación.
Si una cornea presenta una diferencia entre ejes de 50um a la altura de la banda de apoyo (diam. 8.5mm por ej.) debemos colocar una lente esferica, asférica o de apoyo tórico???.
Posiblemente podamos colocar cualquiera de las tres y la lente va a funcionar..... sin embargo, la estabilidad y el confort no serán iguales en las tres variantes.
Hace ya un tiempo que vengo utilizando lentes con zona óptica esférica y banda de apoyo periférico tórica y debo decir que la diferencia en estabilidad y confort es asombrosa como también se dejan de ver los típicos enrojecimientos de conjuntiva en hora 3 y 9 cuando la lente pivotea en el eje plano horizontal.
Sumado al apoyo tórico, en el caso puntual de los queratoconos o las pelúcidas donde la punta de la ectasia está desplazada hacia abajo es imposible que el borde inferior de la lente tenga un despegue del perfil corneal equivalente a la zona superior si no se dispone de diseños asimétricos por cuadrante donde uno pueda solicitar al laboratorio que el cuadrante inferior sea más cerrado.
Todas estas combinaciones redundan en mayor confort y estabilidad de una lente RGP corneal y evitan que uno dependa de una lente escleral para solucionar un queratocono leve.
En este caso, se trata de un queratocono moderado bien centrado con el eje pupilar, un paciente que no había utilizado nunca lentes de contacto y su AV. en el OI es sin corrección de 20/300.
Su refracción es Esf. 0.00 Cil. -6.00 x 165° y obtiene 20/80-
A mi personalmente me gusta adaptar lentes RGP de diámetro grande porque suelen ser más confortables de entrada, sin embargo como se observa en la topografía de elevación la zona astigmática inducida por el queratocono provoca dos depresiones marcadas, una arriba y otra abajo que provocaban que la lente se mantuviera pivoteando sobre el eje horizontal y los bordes superior e inferior tuvieran un excesivo levantamiento.
Este levantamiento generaba molestia por la fricción contra el borde del párpado superior, y si yo colocaba una CB más plana iba a hacer que la lente se calzara en posición superior con un descentramiento que a la larga termina indectándose sobre el limbo en hora 12.
La solución fue hacer una lente con zona óptica esférica y banda periférica tórica, en este caso tiene 3 dioptrías de toricidad. Con ello fue suficiente para que el confort mejorara, se mantuviera bien centrada y me asegure un adecuado intercambio lagrimal.
Ese pequeño detalle muchas veces define si el paciente va a seguir usando sus lentes o las va a dejar en un cajón porque le molestan.
El paciente alcanzó 20/20 con la lente.




domingo, 21 de febrero de 2016

CONTINUANDO CON ESCLERA TÓRICA, AHORA CON BORDES TÓRICOS

En el video se muestra la capacidad de estabilización que proporciona la esclera cuando tiene una toricidad importante.
En este caso la esclera es tán cilíndrica que ocasionaba flexión en la lente. Se utilizó una lente semiescleral de bordes tóricos con ságita diferenciada en 200 micras.
La toricidad escleral es a favor de la regla pero levemente inclinada (160 grados aproximadamente el eje más plano) y se aprecia como la lente se rota en dicha dirección.
El punto que se visualiza abajo indica el eje más cerrado de los bordes tóricos.
La velocidad de estabilización de la lente es similar o superior a una lente blanda tórica.


jueves, 29 de octubre de 2015

CILINDRO RESIDUAL EN QUERATOCONO

Cuando analizamos las posibles soluciones para un paciente con queratocono, siempre sabemos que, salvo un caso muy excepcional, la mejor agudeza visual la alcanzaremos con lentes rígidas.
Por lo general la mayor proporción de aberraciones ópticas se origina en la cara frontal (convexa) de la cornea debido a que la interfase presenta la mayor diferencia en índices de refracción (1,00 aire vs 1,376 cornea), por lo tanto las variaciones de curvatura corneal generan desviaciones importantes de la luz que provocan la mala calidad visual.
Pero ahí no termina todo. Existe otra interfase importante que suele generar aberraciones irregulares y con los sistemas de diagnóstico que existen actualmente cada vez se puede medir con mayor precisión.
Se trata del límite endotelio-humor acuoso.
Las más recientes investigaciones indican que el queratocono suele comenzar por un adelgazamiento corneal desde atrás hacia adelante. Es decir que primero se deforma el endotelio y luego paulatinamente la superficie frontal.
Esto es muy importante porque mediante una topografía de elevación como los sistemas de cámara Scheimpflug (Pentacam, Galilei, etc) se puede detectar un indicio de queratocono en una cornea que no presenta irregularidades en la superficie frontal. (Es decir que la topografía por plácido puede mostrar una cornea normal y tratarse de una cornea que está desarrollando una ectasia).
Dicho todo esto, la interfase endotelio-humor acuoso tiene una variación menor de índices refractivos (1.376 cornea vs. 1.3375 humor acuoso), por lo tanto pueden existir altas distorsiones endoteliales pero su impacto refractivo será menor que si las mismas distorsiones se encontraran en el epitelio.
Por poner un ejemplo, si la topografía de la cara interna de la cornea nos muestra una diferencia de radios de 5.28mm a 13° X 4.85mm ello nos originará un cilindro de -0.7 dioptrías a 13°, mientras que si esos mismos radios correspondieran a la cara frontal de la cornea, originarían en la cara frontal un cilindro de 5.66D.
El cilindro se reduce mucho por lo similar que son los índices de refracción de la cornea y del humor acuoso.
Ahora yendo al terreno de la adaptación de lentes, es muy común que al utilizar la técnica de elevación apical, al no haber compresión sobre la punta del cono, las deformaciones del endotelio se hagan más evidentes que en una adaptación clásica con apoyo central marcado.
Estimo que por este motivo se detectan tantos residuales en la adaptación de esclerales y lentes de elevación apical mientras que en la adaptación clásica casi no aparecen.
En mi experiencia, en un 30% a 40% de los queratoconos adaptados con elevación apical o esclerales si uno busca la máxima AV incluyendo valoración con test de sensibilidad al contraste suele aparecer un astigmatismo residual proveniente de la deformación del endotelio.
Yo antes era un poco reacio a adaptar lentes rígidas tóricas frontales por temor a problemas en su estabilización pero hace un tiempo me incliné a comenzar a corregir estos residuales con la misma lente y me está dando muchas satisfacciones.
Para finalizar, lo que quería manifestar era alentar a que aprovechemos las ventajas de la tecnología actual porque nos permite lograr mejores niveles de visión corrigiendo esos cilindros residuales con mucha estabilidad.
En el video, un queratocono medio con una lente inicialmente de prueba esférica donde se observa el levantamiento de borde en hora 6. A su vez esta paciente tiene un cilindro residual de -1.00 en 180°.
En la continuación del video se ve la lente finalmente adaptada que incorpora borde asimétrico, prisma de estabilización y toricidad frontal logrando una AV. de 10/10 o de 20/20 para los lectores del hemisferio norte.
Tenemos que aprovechar las maravillas que se pueden fabricar con los tornos de control numérico actuales!


domingo, 20 de septiembre de 2015

OXÍGENO Y ALTA POTENCIA EN CORNEAS COMPROMETIDAS

Estamos acostumbrados a pensar que cuando tenemos que resolver un caso con alta irregularidad lo mejor es siempre una lente escleral, sin embargo es muy importante tener presente lo que venimos comentando desde hace tiempo relacionado con la tasa de oxigenación real que proporcionan este tipo de lentes, en especial cuando se combina una alta gradación y un endotelio con baja cantidad de células.
En esta oportunidad me tocó adaptar un paciente que presenta trasplante penetrante en ambos ojos desde hace 25 años combinado con una miopía axial elevada sumado a la miopía inducida por el encurvamiento corneal central.
Además, al finalizar la zona de unión del injerto en hora 6 se produce un cambio marcado de curvatura similar a una Degeneración Pelúcida. Este tipo de geometría suele traer complicaciones por exceso de acumulación de líquido en la zona limbo en hora 6 favoreciendo el desplazamiento de tejido conjuntival y reduciendo la oxigenación.
Por todos estos motivos opté por adaptar una lente de diseño corneo-escleral que facilite el intercambio lagrimal, reduzca el clearence promedio y también disminuya el peso de la lente gracias a la reducción de diámetro.
Para el cálculo de la geometría utilicé la técnica de perfilometría que ya he comentado anteriormente (fotografía a 90° de la cornea y conjuntiva y luego dibujé la lente sobre la fotografía en escala)
La lente definitiva apoya parte en la cornea y parte en la esclera repartiendo el peso y mantiene un pequeño reservorio de lagrima en el centro que mantiene la lubricación y a su vez dicha cámara lagrimal se renueva permanentemente incrementando la tasa de oxigenación.
La lente fue diseñada con un mínimo espesor central de 0.2mm y un lenticular externo de zona óptica de 6mm de diámetro para hacer lo mas delgada posible la lente (tiene -26.00 dioptrías). Su curva base es de 5.80mm y tiene 12.9mm de diámetro. Cuenta además con una segunda curva revertida para obtener una mejor aproximación al perfil corneal.
Aún habiendo tomado todas estas precauciones la lente adquiere un espesor considerable en el borde del lenticular y es por ello que me convenció más una semescleral que una escleral.
Ya he leído varios casos en diferentes foros de contactología de pacientes con endotelio comprometido que tienen problemas con las lentes esclerales por hipoxia, por lo tanto es muy importante tener esto presente a la hora de decidir la lente que vamos a adaptar y siempre que esté a nuestro alcance un conteo endotelial pre y post adaptación.






jueves, 13 de agosto de 2015

LA IMPORTANCIA DEL DIÁMETRO EN LENTES ESCLERALES

Así como hace muchos años se fueron estableciendo diámetros estandarizados para las lentes blandas y quedaron en promedios entre 14.2 y 14.5mm actualmente se están utilizando diámetros variables para las lentes esclerales siendo los más usuales entre 15.0 y 16.5mm
Esto responde a las necesidades de estandarizar medidas para programar los tornos y sistematizar la producción de las lentes, por lo tanto, los fabricantes se inclinan por definir los diámetros donde tendrán mayor demanda.
Sin embargo, existe un tema crucial en las lentes esclerales que está relacionado con el diámetro de la cornea y el nivel de ságita necesaria, donde suponemos que a mayor ságita es imprescindible mayor diámetro.
Este punto muchas veces ocasiona problemas secundarios como el descentrado y exceso de clearance en zona limbar porque el diámetro del vault puede quedar excesivo y tener demasiado "juego" ocasionando que el párpado superior y la gravedad desplacen el lente hacia abajo.
En relación a esto es importante tener presente la posible necesidad de usar lentes más pequeñas o eventualmente solicitar a nuestro laboratorio un diámetro de vault menor cuando estamos frente a una cornea pequeña.
Si no ajustamos este diámetro podemos encontrarnos con una lente descentrada, compresión conjuntival en el semiarco comprendido entre las horas 4 y 8 y clearance excesivo en hora 6 con posibilidad de generar neovasos.
Esto también implica una consideración en la forma que denominamos las lentes como corneales, semiesclerales y esclerales ya que hay consenso en que las esclerales se toman a partir de los 15mm, sin embargo yo creo que esa denominación no refleja la realidad debido a que puede ser necesario usar lentes de 14mm que apoyen en la esclera, no toquen la cornea (es decir que funcionan de manera escleral) y tienen un diámetro menor al establecido como límite de clasificación.
Langis Michaud, uno de los principales expertos e investigadores a nivel mundial sobre lentes esclerales viene hablando hace tiempo de la utilidad de las lentes pequeñas de 14.9mm para facilitar el centrado y evitar la necesidad de hacer una háptica tórica.
En este caso pongo el ejemplo de una paciente usuaria de lentes RGP y que vive en una ciudad costera muy ventosa donde permanentemente sufre problemas con las basuras que vuelan y se le meten entre la lente y su cornea. Utiliza RGP porque tiene queratocono y las tolera muy bien, pero su problema es el viento, por lo cual terminé adaptándole una lente escleral diseñada a medida de 14.5mm de diámetro.
Las pruebas iniciales se las hice con una lente de 15.6, 15.2 y 15.0 y en todos los casos la lente caía hacia abajo ocasionando un prisma muy notorio de la cámara interna.
El diámetro de su cornea es de 10.5mm (tema importante a considerar para ver que diámetro adaptaremos).
En la foto se puede ver el centrado y el clearance que aún muestra un pequeño prisma que será corregido reduciéndo la lente a 14.2mm (y seguirá funcionando como lente escleral).